Lesiones de aspecto subepitelial gástrico
Las lesiones de aspecto subepitelial en el estómago son masas que crecen desde capas internas de la pared gástrica, como la submucosa, y se detectan como protrusiones bajo una mucosa normal durante una endoscopia. Pueden ser benignas, como los lipomas o malignas, como los tumores del estroma gastrointestinal (GIST), por lo que un diagnóstico preciso mediante ecoendoscopia es fundamental.Características generales
Aspecto endoscópico:
Se presentan como nódulos o abultamientos en la superficie del estómago con una mucosa suprayacente normal.
Origen:
Provienen de capas más profundas de la pared gástrica, como la submucosamuscular propia.
Detección:
A menudo se descubren de forma incidental durante endoscopias o estudios de imagen.
Síntomas:
Pueden ser asintomáticas o causar síntomas como sangrado, dolor abdominal u obstrucción, dependiendo de su tamaño y localización.
Causas y tipos comunes
Las lesiones subepiteliales pueden tener diversas causas:
Lesiones benignas:
Tumores del estroma gastrointestinal (GIST): La masa subepitelial más frecuente, que puede ser benigna o tener potencial maligno.
Leiomiomas: Tumores musculares benignos.
Páncreas ectópico: Un páncreas aberrante localizado en la pared gástrica.
Lipomas: Crecimientos benignos de tejido graso.
Lesiones malignas:
GIST malignos: Tumores con potencial de malignidad.
Linfomas: Tumores que afectan los ganglios linfáticos.
Leiomiosarcomas: Tumores musculares malignos.
Diagnóstico
Ecoendoscopia (USE):
Es el examen de elección para caracterizar estas lesiones, ya que proporciona información sobre su tamaño, ecogenicidad, vascularización y profundidad de origen.
Biopsia:
Las biopsias endoscópicas superficiales suelen ser insuficientes porque la lesión está cubierta por mucosa normal, por lo que se requieren técnicas endoscópicas más avanzadas o la ecoendoscopia guiada.
Tratamiento
El tratamiento depende del tipo de lesión, su tamaño y si es benigna o maligna:
Observación:
Las lesiones pequeñas y asintomáticas pueden ser vigiladas con exámenes endoscópicos regulares.
Resección endoscópica:
Para lesiones pequeñas o con bajo potencial maligno, puede realizarse la extirpación por vía endoscópica.
Cirugía:
Las lesiones más grandes o malignas pueden requerir extirpación quirúrgica.