Tomar leche puede causar problemas de salud, especialmente si se trata de leche cruda, que puede contener patógenos peligrosos, o en personas con intolerancia a la lactosa o alergia a las proteínas de la leche. Los posibles daños incluyen síntomas digestivos, enfermedades cardiovasculares por el contenido de grasas saturadas, y un mayor riesgo de ciertas alergias y asma. El consumo excesivo de leche entera también puede contribuir al aumento de peso y a una dieta desequilibrada, lo que puede llevar a deficiencia de hierro en niños.
Daños de la leche cruda
Enfermedades infecciosas:
La leche cruda puede contener bacterias y virus dañinos como la gripe aviar (H5N1) o el causante de la tuberculosis bovina.
Síntomas gastrointestinales:
El consumo de leche cruda puede provocar vómitos, diarrea, dolor abdominal, fiebre, dolor de cabeza y dolores corporales.
Complicaciones graves:
En algunos casos, las infecciones por leche cruda pueden llevar a complicaciones graves como insuficiencia renal, enfermedad hepática crónica, meningitis o incluso la muerte.
Daños por intolerancia o alergia
Alergia a las proteínas de la leche: La alergia a la leche de vaca es común en la infancia y puede causar síntomas como diarrea, vómitos, eccema y sibilancias, aunque muchas personas la superan.
Alergia a la caseína: La caseína, una proteína de la leche, puede adherirse a los vasos linfáticos del intestino, dificultar la absorción de nutrientes y causar problemas inmunológicos, alergias y asma.
Intolerancia a la lactosa: La intolerancia a la lactosa provoca malestar gastrointestinal.
Otros problemas de salud
Grasas saturadas:
La leche de vaca es alta en grasas saturadas, las cuales pueden acumularse en las arterias y contribuir al desarrollo de enfermedades cardiovasculares.
Aumento de peso y obesidad:
El consumo excesivo de leche, especialmente la entera, puede aportar un exceso de calorías, contribuyendo al aumento de peso y a la obesidad.
Riesgo de ciertos cánceres:
Algunos estudios sugieren que el alto consumo de leche puede incrementar el riesgo de padecer cáncer de próstata y ovario, aunque otros estudios no encuentran esta asociación.
Deficiencia de hierro en niños:
El consumo excesivo de leche en niños puede llevar a una dieta desequilibrada y a una deficiencia de hierro.
Recomendaciones
Elige productos pasteurizados:
Para evitar los riesgos asociados a la leche cruda, opta siempre por leche y productos lácteos pasteurizados.
Considera alternativas vegetales:
Si eres intolerante a la lactosa o prefieres no consumir lácteos, existen numerosas alternativas de origen vegetal.
Busca asesoramiento médico:
Si experimentas síntomas adversos después de consumir lácteos, consulta a un profesional de la salud.